3 objetivos cruciales de la Estimulación Cognitiva en Adultos Mayores y su vital importancia.
A lo largo de la vida, las funciones cognitivas experimentan una serie de cambios. Estos cambios pueden traducirse con la presencia de déficits cognitivos o de pérdida de memoria, que interfieren en la realización de actividades complejas.
Sin duda, el deterioro cognitivo, que es toda alteración de las capacidades mentales superiores (la memoria, juicio, razonamiento abstracto, concentración, atención, praxias), es un tema de gran importancia, que comporta implícitamente una serie de limitaciones en referencia a la autonomía y calidad de vida de los adultos mayores afectados. La información que se tiene al respecto se ha extraído, en gran medida, de estudios circunscritos a la demencia.
De hecho, los factores de riesgo principales para padecer un deterioro cognitivo guardan mucha relación con la demencia. Los adultos mayores tienen un riesgo elevado de padecer alguna enfermedad que repercuta en el estado de su cognición, y este riesgo aumenta cuando las condiciones ambientales son poco estimulantes. De ahí, la importancia de considerar una Residencia para adultos mayores donde se puede tomar la Psico-estimulación Cognitiva como un proceso de mejoramiento en la calidad de vida, y es que resulta necesario realizar intervenciones que aseguren una adecuada adaptación del adulto mayor a los cambios ambientales, suministrándole mecanismos para que adquieran estrategias compensatorias y le ayuden a mantener su competencia social.
El ser humano es un ser integral que requiere de la estimulación necesaria para aumentar sus potencialidades y así disminuir las deficiencias que presente. Así, los adultos mayores requieren de estimulación, la cual le permita aumentar sus potencialidades y no permitir el avance de déficits (cognitivos, físicos u otros) que presenten. Existen una serie de factores de riesgo que favorecen el deterioro cognitivo, el principal de ellos es la edad.
El envejecimiento es un proceso de deterioro generalizado del individuo en el que por diferentes procesos los tejidos van degenerándose, “… hay una limitación de la renovación celular y una ralentización de la mayor parte de los procesos”. Sin embargo, dicha degeneración no se debe solamente al proceso de envejecimiento centrado en lo biológico, sino que este deterioro depende de otros factores, tales como el ambiental, social y familiar, pero especialmente del grado de estimulación que se reciba de estos ámbitos.
El adulto mayor con algún deterioro cognitivo puede beneficiarse con la estimulación cognitiva, siendo evidente como primer resultado una mejora en la calidad de vida y disminuyéndose así, el riesgo a que este deterioro empeore.
Cualquier tipo de estimulación cognitiva lo que busca es alcanzar los siguientes 3 objetivos:
- Mantener las habilidades intelectuales (atención, memoria, praxias, funciones ejecutivas, cálculo) conservadas el máximo tiempo posible con la finalidad de preservar su autonomía. Sabemos que esto puede ser mas difícil en personas afectadas con demencia, quienes tienen más memoria de su juventud, ya que se tratan de recuerdos muy aprendidos, fijados y repetidos o que tienen un especial significado emocional o personal. La estimulación de los recuerdos y la expresión de los mismos puede ser de gran dificultad en aquellas personas con trastornos de lenguaje, pero el utilizar por ejemplo canciones u otro tipo de estimulación sensorial como olores, ruidos. puede ayudar a conseguir el efecto que deseamos.
- Crear un entorno rico en estímulos que facilite el razonamiento y la actividad motora. Este objetivo es crucial en su abordaje multidisciplinario, lograr crear un ambiente en donde el Adulto Mayor pueda tener la adecuada estimulación motora teniendo ejercicios y actividades que estimulen su capacidad de decisión y resolución de problemas de la vida diaria.
- Mejorar las relaciones interpersonales de los sujetos. Lograr que el adulto mayor siga practicando habilidades sociales y de convivencia ayuda, no solamente a su salud mental, si no que estimula de manera importante las competencias que debe tener la persona para mantener lo mas íntegro posible sus habilidades sociales.