Vida Asistida en La Residencia de Retiro Juan Pablo II (RRJPII)
Puede decirse que un adulto mayor es dependiente cuando presenta una pérdida más o menos importante de su autonomía funcional y necesita la ayuda de otras personas para poder desenvolverse en su vida diaria.
La Vida asistida, es un programa de cuidado especialmente diseñado para personas que necesitan de esta ayuda en sus tareas de la vida diaria, y que pueden o no necesitar cuidado de enfermería especializado. En las residencias para adultos mayores que cuentan con vida asistida los residentes viven en cuartos independientes, pero reciben ayuda para realizar sus actividades del día a día, como bañarse, vestirse, preparar los alimentos y tomar sus medicamentos.
Es decir, qué si por alguna razón el envejecimiento acarrea en una persona distintos problemas de salud, esta persona descubrirá a medida que las enfermedades avancen que necesitan de asistencia para las cosas más sencillas del día como vestirse, mantener una adecuada higiene personal, controlar medicamentos, y muchas otras cosas rutinarias que son de suma importancia para mantener una calidad de vida adecuada.
Antes de acudir a vivir a la Residencia de Retiro Juan Pablo II (RRJPII), Residencia especializada en trastornos neurodegenerativos un Médico especialista se encarga de diseñar un plan de atención personalizado de servicios de apoyo, dieta, medicamentos que cubran todas las necesidades del Residente y además cubra las expectativas de sus preferencias particulares. Por ejemplo, muchos residentes solicitan ayuda para las comidas, vigilancia en el baño, integración actividades lúdicas y participativas como tender la ropa o ayudar con jardinería, etc., además, de ser necesario, se pueden incluir terapias para afecciones físicas, emocionales, y atención especializada a trastornos de memoria, mismas que en RRJPII tenemos.
La gran ventaja de la Vida Asistida en la Residencia de Retiro Juan Pablo II es la flexibilidad y capacidad de adaptación que ofrece. Cada Adulto Mayor a su ingreso y durante su estancia en compañía de su familia, puede elegir los servicios y las opciones que necesite, y si un residente decide pasar de un estilo de vida independiente a un nivel más alto de apoyo, el médico valora la situación para desarrollar un nuevo plan de apoyo en sintonía con él residente y su familia y así la residencia logara brindar tranquilidad y mejora la calidad de vida significativamente.
Requerir un lugar que cuente con vida asistida no significa que un Adulto Mayor debe dejar de socializar, todo lo contrario, es en estas etapas de mayor necesidad física donde también existe mayor necesidad emocional y social. Una Residencia de Retiro es una comunidad de Adultos Mayores que ofrece muchas oportunidades para reunirse, desde una ligera convivencia al disfrutar de la comida en el comedor, y /o participar en una actividad lúdica o educativa, además de poder tener invitados teniendo todos los protocolos para cuidar de la salud de todos.