De la necesidad de abordar la Ansiedad y la Depresión como Síndromes Neuroconductuales progresivos #19: Cómo identificar un rasgo depresivo o ansioso antes de volverse evidente.
Es relativamente sencillo darse cuenta cuando una persona cambia su estado de ánimo, tanto de manera negativa, como de manera positiva. Sin embargo, cuando se habla específicamente de estados emocionales depresivos o ansiosos, las personas en lugares sociales o públicos hacen lo posible por ocultarlos. Es cuando no pueden esconderlos cuando acuden a buscar ayuda y para este momento los rasgos depresivos o ansiosos son más que evidentes.
Entonces lo primero que debemos considerar en el planteamiento de la depresión y la ansiedad, es que la persona que está empezando a desarrollar estos rasgos se siente avergonzada de sus emociones y sus sensaciones físicas. Cualquier estado emocional parte inicialmente de una idea, tanto si queremos acceder a emocionalidad positiva o negativa, una idea es lo primero que debe manifestarse para iniciar un estado de ánimo consecuente.
Tomemos como ejemplo los espectros de la Bipolaridad. La bipolaridad es una enfermedad neurobiológica que se caracteriza por llevar a la persona a estados extremos de Manía y depresión en períodos cíclicos de tiempo, estas ciclotimias pueden ser tan cambiantes que pueden ocurrir en un año o hasta en un mismo día. Lo interesante de los estados maníacos y depresivos de la bipolaridad es que siempre inician con ideas rumiantes en la psique de la persona, es decir, cuando el ciclo de la bipolaridad es tendiente a la depresión, la mente tiende a idear pensamientos de minusvalía, impotencia, frustración y miedo, pero cuando el ciclo es tendiente a la manía la persona identifica que todo comienza con la idea de “poder lograrlo todo” tan característica de la etapa de manía.
Si el paciente bipolar esta llevando su tratamiento adecuado en el que incluye terapia cognitivo conductual, el paciente tiene la capacidad de elaborar su tabla o cuadro sintomático temporal, estos registros de los eventos mas relevantes le permiten al paciente darse cuenta qué día comienza la primer idea depresiva o maníaca y así pueden empezar a prevenir que se den crisis tanto en un espectro de la enfermedad como en el otro.
Entonces en la depresión y ansiedad lo primero que tendríamos que hacer es escuchar el discurso ideático de la persona en un entorno normal, en la casa, escuela, trabajo, etc. Y cuando existan ideas distorsionadas de la realidad es necesario confrontar y corregir dichas ideas, si existe una negativa al cambio de perspectiva debemos considerar de manera casi certera que hay una inestabilidad emocional que esta tomando forma en la psique de la persona y se deben de iniciar medidas preventivas como atención (escuchar a la persona en todo su monólogo emocional aunque parezca ser positivo), compañía de calidad y en esta dinámica es importante registrar cualquier cambio drástico o irracional en las ideas.