Principales cambios en la Conducta de Adultos Mayores con Demencia avanzada. Sencillos consejos para evitarlas. Parte 2
En la entrada anterior les describimos 2 de las principales conductas asociadas a los adultos mayores con demencia avanzada, la agitación y el delirio.
El día de hoy revisaremos: la repetición de palabras o acciones y la deambulación (vagabundeo).
CONDUCTAS REPETITIVAS: Los adultos mayores con demencia suelen repetir una y otra vez determinada palabra, afirmación, pregunta o actividad.
Este tipo de conducta es por lo general inofensivo, pero puede provocar irritación o estrés a la persona cuidadora. Puede deberse a la ansiedad, al aburrimiento, al temor o a factores del ambiente.
Recomendaciones para manejar un comportamiento repetitivo:
- Cree sentimientos de seguridad y bienestar, mediante la palabra y el contacto físico.
- Intente distraerle.
- No le reproche que acaba de hacer la misma pregunta.
- No explique planes cuando él/ella esté en estado de confusión hasta justamente antes del momento de ejecutarlos.
- Elimine la ansiedad y la incertidumbre sobre hechos futuros. Ponga carteles o anuncios en determinados lugares donde ocurrirán eventos planeados (hora de la comida, hora del paseo, etc.)
- Aprenda a interpretar ciertas conductas. El estado de agitación o el tirarse de la ropa, por ejemplo, pueden indicar la necesidad de ir al baño.
DEAMBULACIÓN: La deambulación es una conducta que suele aparecer en la etapa intermedia de la enfermedad, pero es mucho ms evidente en estadios avanzados.
Causas de la deambulación:
- Confusión. Al estar desorientado no se da cuenta que está en casa, y sale dispuesto a «encontrarla». Se encuentra en un lugar desconocido para él.
- Delirios. Piensa cosas que no son reales en su presente y puede estar tratando de cumplir una responsabilidad del pasado, tal como ir a trabajar o ir a buscar a un hijo.
- Intentos de escapar de una amenaza real o percibida. Las personas con demencia pueden sentirse asustados por un hogar ruidoso, un visitante extraño o incluso por la creencia de que su persona cuidadora está tratando de hacerle daño.
- Nerviosismo. Está más ansioso. Algunas veces la ansiedad y el nerviosismo son efectos secundarios de algún medicamento, consulte con un profesional si la conducta persiste.
- Inquietud, por la falta de ejercicio y otras estimulaciones.
- Búsqueda de algo, ya sea una persona, un lugar o un artículo personal que haya perdido.
Recomendaciones para el manejo de la deambulación:
- Realizar ejercicios periódicos para reducir a la ansiedad.
- Obtener un brazalete de identificación médica. Asegúrese de que lo use en todo momento, a menudo se venden en farmacias. Existen otras opciones como localizadores GPS, tipo reloj o llavero.
- Brinde un lugar despejado y seguro para caminar.
- Dele algo repetitivo que hacer.
- Guarde en un lugar seguro algunos artículos esenciales, como el abrigo, la cartera o las gafas.
- Tenga las puertas que conducen al exterior cerradas, y mantener las llaves en un lugar seguro, donde no tenga acceso a ellas.
- Instalar dispositivos de seguridad en las ventanas.
- Instale timbres o alarmas que suenen cuando se abra una puerta que conduce al exterior.
- Avise a sus vecinos que su familiar es una persona con demencia y pídales que le avisen si ven que está solo en la calle.
- Pruebe a usar barreras para ocultar las puertas o señalamientos de prohibido el paso.
En la Residencia de Retiro Juan Pablo II (RRJPII), Residencia especializada en trastornos neurodegenerativos, te recomendamos que si cualquiera de estos síntomas se vuelve más grave acudan con su médico neurólogo.