Importancia de la Salud mental en los adultos mayores.

De acuerdo con datos de la OMS, entre 2015 y 2050, se estima que el porcentaje de los habitantes del planeta mayores de 60 años casi se duplicará, pasando del 12% al 22%.

Sin embargo, la salud mental en adultos mayores es poco abordada y visibilizada.

Envejecimiento, depresión y suicidio

La depresión no es un fenómeno exclusivo de la vejez, sino que es una enfermedad de salud mental que, de no recibir un tratamiento oportuno, y sumado con otros factores de riesgo, puede incluso llevar a una persona a intentar quitarse la vida. Ahora, la particularidad que se da en el adulto mayor es que lo hacen de forma más cuidadosa, en donde normalmente van a usar métodos más letales porque no va a ser algo tan impulsivo como quizás se observaría en adolescentes.  En este sentido, habitualmente el adulto mayor cuando intenta suicidarse lo logra, o bien es muy difícil que se recuperen de los efectos del intento suicida.

Entre los factores que pueden afectar la salud mental y eventualmente pueden incidir en la aparición de pensamientos suicidas en los adultos mayores, son los sentimientos de soledad y desesperanza: relacionarse no es solamente de estar en contacto con otros, sino sentirte importante para otro, lo que para toda persona es una necesidad básica, desde que nacemos hasta que morimos. Otros factores de riesgo importantes son:

• Pérdida de seres queridos, especialmente si se trata de la pérdida del cónyuge y/o hijos.
• Pérdida de independencia, movilidad y limitaciones físicas.
• Sensación o miedo de ser una carga para otros.
• Presencia de dolor o enfermedades crónicas que afectan la calidad de vida -como la artritis, osteoporosis y diabetes, entre otras-.
• Deterioro cognitivo.
• Problemas económicos.

La suma de todos estos escenarios irá dañando la salud mental del adulto mayor y, cuando esto sucede, pueden aparecer trastornos del ánimo, o una depresión clínica, que es un caracterizado por la tristeza, desesperanza, pérdida del placer por las actividades que antes se disfrutaban y pérdida de interés o apatía.

Señales a las que se debe prestar atención:

Ya sea como hijos, nietos, cuidadores, podemos estar atentos a ciertas señales que nos podrían indicar que el adulto mayor podría estar sufriendo un problema de salud mental. Tomar acción puede marcar la diferencia y ayudar a sobrellevarlo mejor, buscar ayuda profesional y así disminuir el riesgo de suicidio:

1. Aislamiento social.
2. Desapego con los artículos materiales que aprecia como comenzar a regalar sus posesiones.
3. Pérdida de interés en actividades que antes solía disfrutar.
4. Abandono de las acciones de autocuidado.
5. Preocupación excesiva por la enfermedad o la muerte.
6. Expresa directamente pensamientos suicidas o que desea morir.

Acciones para llevar a cabo:

1. Escucharlos sin juzgar y validar lo que la persona está sintiendo.
2. Acompañarla durante el proceso y hacer seguimiento de que la persona efectivamente busque ayuda.
3. Orientar y/o ayudar a buscar ayuda profesional.
4. Alertar a otras personas cercanas que puedan colaborar para construir una red de apoyo efectiva.
5. Ofrecer ayuda en temas prácticos que puedan ayudar a la vida cotidiana.
6. Mantener contacto frecuente personal o telefónicamente.